El Plzen no piensa en los puntos, sino en su orgullo

El Plzen no piensa en los puntos, sino en su orgullo

El entrenador del equipo checo admite que tiene poco que ofrecer ante el Barcelona en el Camp Nou.

El Barcelona no necesita presentación en Europa. Campeón de las dos últimas ediciones de la Champions League, de las tres últimas de la Liga BBVA, líder de la actual y con varios de los jugadores que están considerados entre los mejores del mundo, con Lionel Messi a la cabeza.

Todo eso lo sabe el Viktoria Plzen, que también está al tanto de que el equipo de Pep Guardiola le metió cinco goles al BATE Borisov en Minsk hace tres semanas, algo que le sigue confirmando como una de las apuestas en Champions League. Ante tal panorama, la intención de salir del Camp Nou con algún punto se antoja, cuando menos, valiente.

“Espero que no concedamos demasiado”, señala Pavel Vrba, entrenador del conjunto checo, el cual sabe que la derrota por la mínima puede saber casi a victoria en el retorno a Chequia. Al menos llegan con el alivio de haber ganado el último partido que han disputado en la liga de su país tras cuatro partidos sin una victoria.

Por su parte, Guardiola mantiene su habitual discurso de no confianza. “El mayor problema de este partido es que esto es la Champions League y los clubes pequeños siempre nos plantean problemas”, ha declarado el técnico blaugrana, tan modesto como siempre, aunque hay que recordar que el Rubin Kazan ya le mojó la oreja alos de la Ciudad Condal hace exactamente dos años menos un día.

La intención es clara: conseguir el máximo de puntos posible en los dos encuentros con el Plzen para llegar a San Siro en una buena situación antes de finalizar la fase de grupos ante el Borisov en el Camp Nou.

Gerard Pique vuelve a ausentarse después de lesionarse en los primeros minutos del partido contra el Racing de Santander el pasado sábado, mientras Cesc Fábregas y Alexis Sánchez, dos de las apuestas en el mercado de fichajes, todavía no están recuperados.

Pero el regreso de Andrés Iniesta ya supuso un alivio para el club blaugrana ante el Racing tras demostrar que su total entendimiento con Messi sigue dando los mejores resultados posibles.